viernes, 21 de agosto de 2009

¡¡CHAU CLARIN!!

El día de ayer, 21 de agosto, la presidenta, con Dios de testigo y apoyando la causa, cortaron uno de los monopolios más grandes de la Argentina: la relación CLARIN-FUTBOL. En donde no sólo había que pagar para ver futbol, sino que había que esperar hasta el domingo a la noche para que quisieran darlo por TV abierta. Con esta medida del gobierno no sólo termina con el futbol pago, sino que se le saca una de las mejores herramientas que tenía el grupo Clarín (dueño del 75% de las señales de cable del país) de extorsión a las pequeñas empresas de cable que sino acordaban o se vendían por pocos pesos se perdían de tener la transmisión del futbol y por ende las posibilidades de competir contra el monstruo monopólico de multimedios sojero.

PATRIA SI

CLARIN NO




martes, 18 de agosto de 2009

La Editorial de Don Mariano

(…) Mediante esta súbita maniobra, los Kirchner esperan llevarse las palmas de la televisación gratuita de los partidos de fútbol. Con sus constantes ansias de ganar, un verbo que para Kirchner sólo se conjuga cuando sus enemigos, reales o imaginarios, pierden, el ex presidente parece estar en camino de prevalecer en su segunda batalla consecutiva. Lo que importa en una guerra, empero, no es ganar tal o cual batalla sino una sola: la última. En julio de 2008, el Gobierno había perdido su batalla contra el campo. En junio de este año perdió la segunda, esta vez a manos del electorado. Ahora parece dispuesto a ganar a cambio otras dos batallas, en el Congreso y en el fútbol. La guerra, mientras tanto, continúa. El próximo 10 de diciembre, por ejemplo, los Kirchner perderán otra batalla cuando jure el nuevo Congreso. Hitler había ganado sucesivamente en Austria, Checoslovaquia, Polonia, Bélgica, Francia y Noruega, hasta que perdió en Rusia y en la segunda fase de las Ardenas, con la salvedad de que estas dos batallas fueron las últimas. Si Kirchner se empeña ahora en acumular victorias en nuevas batallas intermedias, nada indica que por eso habrá ganado la guerra que él mismo ha declarado. Pero ¿tendremos que vivir entonces en zozobra hasta las elecciones presidenciales de 2011, cuando Kirchner espera librar su última batalla? Si se tiene en cuenta el enorme costo económico y social que su obsesión por la victoria les traerá a los argentinos, ¿alguna voz interior le susurrará en algún momento que la democracia se halla por encima de la pasión de un hombre?”. Fragmento de la editorial del Dr. Mariano Grondona del Diario La Nación del 16 de Agosto de 2009.

El fragmento seleccionado de la editorial del día domingo del diario La Nación no hace más que gritar a los cuatro vientos cuales son las intensiones de la oligarquía en la Argentina frente a la coyuntura política, económica y social, obviamente bajo la pluma de su mejor, o por lo menos uno de sus históricos y más mediáticos intelectuales.
El porque de esta editorial de Don Mariano podemos encuadrarlo desde dos marcos de análisis. El primero y casi en un análisis psicológico de su escritor es que ante el paso de los años y las democracias nuestro ilustre intelectual no encontró mejor coyuntura para poder despuntar el vicio, si ese que se le fue negado desde hace ya 26 años, el de ser el soporte mediático e ideológico de un nuevo golpe de estado. Claramente lo entendemos, durante décadas los apoyó, los disfrutó y como clase obtuvo cuantiosos beneficios y últimamente se lo impidieron, solo Don Carlo (no el de la propaganda) le puedo dar una bocanada de aire fresco. Por suerte, para él, ahora estos setentistas que ocuparon el poder le pueden generar la última alegría, los últimos párrafos de su vida dedicados a ser el órgano de prensa de una nueva alianza golpista. Lástima Don Mariano que para esta vieja-nueva tarea le salio a competir el gran diario argentino, va a estar peliaguda la cosa!!!
El segundo punto de vista desde el cual podemos analizar la editorial pasa por un plano un poco más profundo. Es el intento de enmascarar el proceso político de la Argentina como una nueva guerra en donde cada día se libra una batalla en las cuales la suerte de sus vencedores no altera una victoria final cuasi natural que parecería ya estar escrita. ¿Cuál sería el enmascaramiento que se intenta producir entonces? Simple, lo que intenta hacer Don Mariano, junto con los intereses que representa como clase, es el de aislar, temporal y socialmente las luchas/contradicciones que están estallando en la argentina. La lucha del pueblo contra el monopolio y la desinformación de los sectores económicos concentrados se la enmascara como la pelea de un matrimonio loco contra sus competidores de mercado.
A la vez que se le da tono de guerra, aislando y desvinculando de todo pasado y futuro a una de las tantas batallas que el pueblo argentino viene dando desde el surgimiento de la nación. Así la lucha por la liberación nacional no empieza el 29 de junio de 2009 o el 25 de mayo de 2003 como quiere convencernos Grondona, esta es solo una batalla, la lucha comenzó con la resistencia de los pueblos originarios y se desarrolla a lo largo de la historia con las ideas de Mariano Moreno, en las luchas de las montoneras federales, en Yrigoyen, en FORJA, en los descamisados, en Perón y Evita cuando cavaron la primer y más profunda victoria popular, en la resistencia, en los 70´s, en la resistencia al neoliberalismo, en el 19 y 20 de diciembre del 2001, en el kirchnerismo y en la última marcha del 30 de abril de la CGT. Claramente todo esto lo sabe muy bien Don Mariano, pero también sabe que para poder ganarnos nos lo tiene que hacer olvidar.
Por último, en lo que si comete un error el editorialista de la oligarquía es en pensar que la historia ya está escrita, por suerte nosotros sabemos que no es así.

viernes, 14 de agosto de 2009